martes, 5 de agosto de 2008

TENDENCIAS FUTURISTAS DE LA MEDICINA


Esbozar un panorama sobre la medicina en el futuro no es una tarea fácil, pues se corre el riesgo de confundir aquello que se nutre de la ciencia con lo que abreva de la ciencia ficción. Sin embargo, existe una forma de minimizar este riesgo: echar mano de ciertos campos de la investigación médica que —a pesar de estar hoy en pañales— ya muestran resultados promisorios. iagnóstico genético

El avance en el tratamiento de las enfermedades será precedido (como ocurre ya en la actualidad) por el avance de los métodos diagnósticos. "La biología molecular ofrece constantemente nuevos resultados en materia de diagnóstico, que permiten detectar un número cada vez mayor de patologías", comentó la doctora Viviana Bernath, directora del centro de estudios genéticos Genda.

"Llegará el día en que rutinariamente se podrá leer todo el genoma de un individuo, compararlo con un genoma normal, para luego predecir cuáles son las enfermedades que a lo largo de su vida esta persona tendrá riesgo de padecer", agregó.

Terapia génica

El conocimiento de los mecanismos que regulan el funcionamiento de los genes es la llave que abre la posibilidad de corregir ciertos errores en el ADN, que son el punto de partida de numerosas afecciones de origen genético, como muchas formas de cáncer. La terapia génica, que mediante la introducción de genes "terapéuticos" corrige dichos errores, es un herramienta que en los últimos años ha comenzado a arrojar resultados alentadores.

"La medicina intervencionista del futuro estará signada por intervenciones específicas sobre la fisiopatología molecular de las enfermedades —apuntó el doctor Pablo Argibay, investigador del Hospital Italiano—. La terapia génica debería tener un rol destacado cuando se entiendan plenamente la expresión, regulación y duración de la acción de los llamados genes terapéuticos."

Farmacogenética

Del entrecruzamiento de la genética y la farmacología está surgiendo una nueva disciplina: la farmacogenética. "Ésta trabaja para conocer qué sitios puntuales del genoma de una persona son responsables de la respuesta a un fármaco determinado —explicó Bernath—. Permitirá determinar si un individuo responderá o no a determinada medicina."

"Hay pacientes en quienes ciertas drogas tienen efectos tóxicos o no tienen el efecto esperado —agregó el doctor Roberto Favaloro, de la Fundación Favaloro—; en el futuro se van a poder hacer drogas de acuerdo con el material genético de cada pacientes."

Trasplante de células stem

"La longevidad prolongada hará necesario el reemplazo de tejidos por células o tejidos obtenidos por ingeniería -señaló Argibay-. Esto será cosa de todos los días cuando se conozcan las llaves de la inmunorregulación del rechazo."

El trasplante de células madre o stem, capaces de convertirse en cualquier célula del organismo, es una de las principales promesas de la medicina para el tratamiento de males degenerativos, como el Alzheimer.

"Estamos en el comienzo del éxito de la reparación o regeneración del músculo cardíaco mediante el implante de células stem, que permita la mejora de la función cardíaca, y el inicio de la aplicación de estrategias moleculares que nos conducen a la formación de nuevos vasos", citó como ejemplo el doctor David Vetcher, presidente del Colegio Argentino de Cirugía Intervencionista.

"Actualmente, en los casos de insuficiencia cardíaca, cuando los tratamientos habituales no responen se recurre al trasplante cardíaco —agregó el doctor Roberto Favaloro—. En el futuro, el trasplante pasará a un segundo plano; se van a utilizar dispositivos de asistencia ventricular, combinados con implantes de células madre o mioblastos, que permitirán regenerar el músculo cardíaco dañado."

Otro camino es la ingeniería de tejidos, que permite crear in vitro tejidos u órganos a partir de células que se hace crecer en matrices. "En las próximas décadas, cambiará la forma en que la medicina trata las enfermedades que requieren un remplazo de órganos o tejidos —dijo el doctor Anthony Atala, investigador del Hospital de Niños de Boston—. El tejido creado en laboratorio será genéticamente idéntico al paciente, por lo que no habrá rechazo."

Cirugía robótica

Robots como el Da Vinci, que operan guiados por cirujanos, ya son una realidad en algunos pocos centros médicos. Su futura masificación depende de que sean sorteadas ciertas limitaciones técnicas que los vuelven muy onerosos.

"Cuando puedan realizar las cirugías más rápido, su costo caerá y comenzarán a revolucionar la práctica quirúrgica", dijo el doctor Roberto Battellini, que opera con un Da Vinci en el Herzzentrum, de la Universidad de Leipzig, Alemania.

Terapia fetal

"La salud al nacimiento y el posterior desarrollo del individuo se jugarán en el terreno fetal —afirma Argibay—. Como resultado del avance de los métodos de diagnóstico prenatal ha surgido en los últimos años la posibilidad de encarar la corrección quirúrgica de ciertos problemas congénitos dentro mismo del útero materno. No es difícil prever el desarrollo de unidades donde el feto como paciente sea una realidad."

IN VENTOS DE LA MEDICINA EN LA ERA DE LA INFORMACION


La medicina tiene el 1909 uno de sus primeros hitos en el siglo XX con la creación del 'salvarsan', el primer medicamento contra la sífilis, una enfermedad que acabó con la vida del temido Al Capone. En 1915 se sistematiza la transfusión de sangre, una práctica que tuvo un desarrollo bárbaro en el siglo XVII, cuando se inyectaba sangre a animales a humanos. Había tal cantidad de muertos que el Papa prohibió tal práctica. En 1901 Lansteiner descubre los grupos sanguíneos y se conoce la incompatibilid
La historia de los ordenadores en los que hoy se trabaja comenzó en 1958 cuando Jackie L. Kilby empleó unas vacaciones de su empresa Texas Instruments para desarrollar una mayor capacidad para el transistor. Desde entonces existen los 'chips' en informática. El primer microprocesador de Intel data de 1971 y de 1983, el primer ratón.
El sonar (1906), un ojo bajo el agua, el radar (1935) -uso de ondas de radio para detectar objetos- o el semáforo (1913), son ingenios que nos acompañan hoy. Las innovaciones domésticas, menos espectaculares pero más curiosas por su cercanía, se concentran la última parte de la muestra. Pese a ser la aspiradora por antonomasia en el mundo anglosajón la Hoover (1907), no es la original. La primera nació del ingenio del inglés Hubert Cecil Booth en 1901 y funcionaba con petróleo.

LA MEDICINA EN LA ERA DE LA INFORMACION


El siglo XIX, que arrancó por entero de la Revolución Francesa en el orden político, con la proclamación de las formas del derecho público y con la promulgación de leyes de carácter democrático, fue también una centuria de fecundidad científica y la medicina moderna fue una de sus grandes creaciones. Entre otros abundantes logros de esta época, procede citar el descubrimiento del vector de la fiebre amarilla y el anuncio en 1881 de la teoría metaxénica de la transmisión de enfermedades por el inmortal sabio cubano Carlos J. Finlay Barrés.4
Esta apretada síntesis de los éxitos de la medicina en el siglo XX se puede iniciar con el avance farmacológico, a cuyo efecto es justo enfatizar el desarrollo de un gran número de vacunas que han ocupado un lugar relevante en el incremento de la expectativa de vida de niños y adultos, en virtud de su acción preventiva contra múltiples y peligrosas enfermedades. El primer destello de comprensión del funcionamiento de la inmunidad humana había tenido lugar en 1797 con las vacunas contra la viruela de Jenner.3 Los primeros científicos que obtuvieron los Premios Nobel de Fisiología o Medicina concedidos a principios del siglo XX, fueron precisamente aquellos que habían hecho gran parte de su trabajo en décadas anteriores con el fin de controlar las enfermedades infecciosas que estaban cobrando muchas vidas humanas. Pocas familias escapaban entonces a los terribles efectos de la tuberculosis, el paludismo, la sífilis, el cólera, la gangrena, la lepra, la influenza, la difteria y la disentería. uando se pudo demostrar que las bacterias eran las causantes de muchas infecciones, los científicos comenzaron a preocuparse más por destruirlas, que por buscar paliativos contra los síntomas que producían. De tal manera, los métodos establecidos por el bacteriólogo alemán Robert Koch a raíz de haber aislado la bacteria desencadenante de la tuberculosis, se emplean todavía en la microbiología médica, cuyo desarrollo se debe en gran parte a sus esfuerzos para cultivar e identificar las bacterias.7

La biología es una ciencia que subyace dentro de la medicina, lo cual se expresa en el afán del hombre por buscar y aprender lo más posible acerca de los seres vivos, en especial del propio hombre. La exploración de la biología celular se ha podido llevar a cabo gracias al desarrollo del microscopio electrónico durante la década de los años 30, y con cuya ayuda Max Delbrück, Alfred D. Herhey y Salvador Luria pudieron observar el modo en que los virus atacan a las células vivas, a la vez que Albert Claude, Christian R. De Duve y George E. Palade lograron ofrecer por primera vez una visión detallada acerca de las estructuras celulares conocidas como organelas, las cuales producen y atesoran los procesos químicos de la vida.8,9


domingo, 3 de agosto de 2008

INVENTOS DE LA MEDICINA EN LA ERA INDUSTRIAL


Louis Pasteur descubrió una vacuna contra la rabia y como mantener los alimentos. Luego Robert Koch (alemán) descubrió la vacuna contra la tuberculosis y el cólera.

El dentista Estado Unidense descubrió un anestésico efectivo, Morton descubrió el ETER.

James Simpson descubrió el cloroformo. Todos estos anestésicos, permitieron practicar operaciones sin dolores para los pacientes.

El ingles LISTER desarrollo métodos antisépticos que permitió a los cirujanos esterilizar sus manos, ropas y los instrumentos que usaban en las operaciones.

Salk y Sabin descubrieron vacuna contra la poliomielitis. Basting y Best descubren la insulina que se usaba para contrarrestar la Diabetes.

Sin embargo, hoy la ciencia trabaja arduamente para descubrir una vacuna contra el SIDA.

LA MEDICINA EN LA ERA INDUSTRIAL


LA MEDICINA EN LA REVOLUCION INDUSTRIAL


A mediados del siglo XVIII se inicia en Inglaterra la Revolución Industrial. En el siglo XIX varios países se incorporaron a este proceso. El mundo se llenó de fábricas, los ferrocarriles cruzaron los continentes, las personas se desplazaron hacia las ciudades, para trabajar en las Fábricas. El invento principal fue la máquina de vapor, debido al ingenio de James Watt. Sin embargo este gran desarrollo industrial se vio en graves problemas sociales, afectando a los grupos más pobres de la sociedad. Durante este Siglo, a pesar de ser el Siglo de las Luces, se produce un cierto estancamiento en las universidades modernas, y la vanguardia de la ciencia moderna se sitúa entre los científicos que trabajaban al margen de la Universidad en las Academias e Instituciones profesionales. Estas comienzan a fundarse para promover la investigación y la publicación de los resultados de las investigaciones entre la comunidad científica. Es la época del gran auge de las ediciones y publicaciones de las academias europeas, Italia, Roma, Florencia, París, Londres.

En este entorno funda Pedro Virgili en 1748 el Real Colegio de Cirugía de Cádiz, destinado a la formación de profesionales para la Armada y el Ejército, en un período en el que se constituyó la técnica quirúrgica y se enriquecieron sus fundamentos científicos. La fundación de este colegio fue seguida por el Real Colegio de Barcelona, cuya finalidad era preparar cirujanos hábiles para el ejército y para la sociedad civil, respectivamente.

Dotados de buenos medios y con una orientación eminentemente práctica, los Colegios de Cirugía dieron una enseñanza rigurosa y al día. A diferencia de las facultades universitarias, las impartieron exclusivamente en lengua castellana y utilizaron una amplia serie de excelentes manuales en su mayoría publicados por sus profesores. n 1738 se creó nominalmente la Universidad de San Felipe, que empezó a funcionar en 1756. Estaba ubicada entre las calles San Antonio y del Chirimollo (hoy Moneda), en la manzana del actual Teatro Municipal. Así se inició la enseñanza de la medicina en Chile, separada de la cirugía. El título conjunto de médico-cirujano se estableció en el papel en 1833 con la creación de la Escuela de Medicina del Instituto Nacional. En la Universidad de San Felipe el plan de estudios comprendía 4 años de Prima Medicina -complementada con las clases de Vísperas-, que conducían al título de Bachiller, y dos años de práctica en el Hospital San Juan de Dios, con los que se optaba al título de Doctor. Los exámenes eran en latín. La materia de Prima Medicina era todo teórica, y era tratada por un solo profesor, en clases diarias de una hora y media, desde septiembre a marzo. Otros progresos de ese siglo fueron la renovación y construcción de hospitales en varias ciudades, la fundación de la Casa de Huérfanos o Expósitos en 1758 y la de las Recogidas en 1764. La primera estaba unicada en la manzana comprendida por las actuales calles Manuel Rodriguez, San Martín, Agustinas y Huérfanos. La segunda, asilo de las mujeres de vida licenciosa, se hallaba en las faldas del Cerro Huelén, en la parte de la calle del Oriente que hoy es Miraflores. En 1782 se construyó el Hospital San Borja, para mujeres, ubicado en La Cañada entre las calles Dieciocho y San Ignacio, entonces Callejón Urgarte.

viernes, 1 de agosto de 2008


PLANTAS MEDIINALES: Esta práctica probablemente se originó en tiempos prehistóricos cuando el hombre descubrió que ciertas plantas tenían poderes curativos. En las antiguas civilizaciones de China, Egipto, Persia y Grecia, se clasificaron los remedios herbarios, para luego compilarse en libros.

AGUJAS: como primera instancia se dio la primera agujas de hueso en el año 10.500 antes de cristo empezándose a evolucionar mas y mas como buen ayudante de la medicina en general, se usaba primero como herramientas.

INVENTOS DE LA MEDICINA EN LA ERA AGRICOLA


INVENTOS

La Aspirina: Las pequeñas tabletas de ácido acetilsalicílico han curado, tal vez, más enfermedades menores que cualquier otra medicina. Hipócrates fue el primero en darse cuenta del poder curativo de esta sustancia. El tratamiento griego era a base de té de corteza de sauce, y era efectivo contra la fiebre y la gota. Mucho tiempo después, en 1.899, el químico Felix Hoffman perfeccionó el remedio experimentando con su padre artrítico, y lo comercializó bajo el nombre de Aspirin